Entre los muros de la calle vacía
el amanecer extiende sus ramas,
el sol se despereza contra las fachadas
arrastrando lentamente sus pies de plomo
y la muerte huye despavorida
ante la claridad que se abre paso.
Apenas se levantan las primeras persianas
y el olor a café atrae
los pasos somnolientos
a la vez que acaricia sensualmente
mi frágil esqueleto perezoso
que se arrastra por el helado suelo.
Siento frío este día neonato
en que las venas se me hielan
como hilo tejiendo una mortaja.
Me paraliza el miedo,
atenaza mis manos
y el olor del café se torna hediondo,
corrompido de muerte fugitiva
invitándome al viaje inevitable.
Apresuradamente huyo sin rumbo fijo,
me lanzo entre páginas impresas
buscando un lugar dónde huir,
pero ya es tarde. Abro el periódico
y allí leo en las necrológicas,
un tal San Valentín, -siento un escalofrío-
ha muerto atrapado al quedar sepultado
al final de un poema.
el amanecer extiende sus ramas,
el sol se despereza contra las fachadas
arrastrando lentamente sus pies de plomo
y la muerte huye despavorida
ante la claridad que se abre paso.
Apenas se levantan las primeras persianas
y el olor a café atrae
los pasos somnolientos
a la vez que acaricia sensualmente
mi frágil esqueleto perezoso
que se arrastra por el helado suelo.
Siento frío este día neonato
en que las venas se me hielan
como hilo tejiendo una mortaja.
Me paraliza el miedo,
atenaza mis manos
y el olor del café se torna hediondo,
corrompido de muerte fugitiva
invitándome al viaje inevitable.
Apresuradamente huyo sin rumbo fijo,
me lanzo entre páginas impresas
buscando un lugar dónde huir,
pero ya es tarde. Abro el periódico
y allí leo en las necrológicas,
un tal San Valentín, -siento un escalofrío-
ha muerto atrapado al quedar sepultado
al final de un poema.
7 comentarios:
Felicitaciones, Magdalena.
Emilio.
Pobre hombre, morirse justo el día del amor y la amistad. Quizá quiso desaparecer para que los lelos enamorados dejen de invocarlo, quién sabe.
Me ha gustado este estilo, casi no te reconozco en él, pero en la variedad está el gusto, ¿no?
Besos y felices carnavales.
Narci
¿Si quedó sepultado al final del poema fue porque el poema cayó sobre él o porque fue pensado justamente como su tumba?
No me hagas caso. El poema es magnífico. Felicidades
Poesía, motor neuménico.
Imagen brutal el sol desperezándose CONTRA las fachadas.
Me gusta el frío y el olor a café, le dan un toque muy personal a la Aurora, muy cotidiano, muy hermoso.
Y el final del poema... sencillamente magnífico.
Emilio, mil gracias.
Narci, es un experimento. Espero que haya más.
Jose Javier, diste en el clavo, ¿qué mejor que enterrar a tal engendro, amor y consumismo junto? ¿Y qué mejor tumba para el mayor reclamo de poetas que bajo un poema?
Sueño, todo un lujo tu comentario.
Un abrazo a cada uno de vosotros.
San Valentin muere el mismo dia que nace por ser una festividad comercial... pero en cada corazon enamorado esta el altar de su santoral y la poesía, dícese su santina.
Con cariño, esencia.
Esencia, aunque sea con tanto retraso, mil gracias por pasar por mi rincón.
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